Dentro del fitness, aquellos que hemos construido el hábito de entrenar y alimentarnos consistentemente buscando la forma de generar progresos en nuestra performance, en alguna ocasión nos hemos encontrado en un estancamiento en nuestros progresos.
En ocaciones esta puede ser motivo de frustración e incluso abandono de algunos hábitos.
Intentamos y usamos miles de recursos para poder avanzar y comenzamos a probar un sin fin de estrategias. Todos estos recursos utilizados, a veces de forma improvisada, en la gran mayoría de los casos termina llevando al mismo lugar, a la no transformación.
Si bien una adaptación positiva a nivel físico está determinado par varios factores, hay algunos principios que son determinantes a tener en cuenta. Estos deben ser de vital importancia a la hora de planificar un proceso.
El principio más importante y crucial podríamos decir que es el de la ESPECIFICIDAD.
Es común encontrarnos realizando estrategias de entrenamiento y alimentación que no son específicas para el objetivo o finalidad que estamos buscando.
Un ejemplo de esto puede ser cuando personas que quieren mejorar el tamaño de sus piernas y eligen como actividades principales dentro de la planificación clases de cycling, funcional y running.
Si bien estas actividades pueden traer múltiples beneficios en la salud e incluso en Estética, no son la mejor opción para desarrollar tamaño muscular en ninguna parte del cuerpo; sobre todo en personas que llevan varios meses de entrenamiento y nutrición balanceada.
Claramente en personas sedentarias que inician por primera vez un plan de actividad física y ordena su alimentación, estas estrategias podrían traer beneficios a nivel tamaño muscular, pero esto será solo por un tiempo y las adaptaciones caerán de forma progresiva.
Entonces es importante primero que nada tener claro el objetivo para poder entender el camino y las estrategias que se utilizarán para poder alcanzarlo.
Cada objetivo tiene su abordaje y si no lo tenemos claro es muy difícil seleccionar las estrategias más específicas para conseguirlo.
Cuando hablamos de estética corporal hay tres procesos que deberíamos conocer e incluso planificar inteligentemente para maximizar resultados.
Estos procesos o etapas son las siguientes:
- Ganancia Muscular.
- Pérdida de grasa corporal o definición.
- Mantenimiento
¿Cuál es la actividad más específica a nivel estética corporal?
Teniendo en cuenta que un cuerpo estético debe contar con un desarrollo armonioso de masa muscular, el entrenamiento de la fuerza es de vital importancia y la actividad que no es negociable dentro de la planificación. Incluso en un proceso de definición de aquellas personas que deban disminuir el porcentaje de grasa corporal, las pesas juegan un rol fundamental para el mantenimiento de la misma, a pesar de realizar o no ejercicio aeróbico como estrategia para este objetivo.
Resumiendo, la prioridad número uno en entrenamiento a la hora de mejorar tu cuerpo, sin duda va a ser siempre el desarrollo de la fuerza a través de ejercicios de sobrecarga, combinado a otras estrategias que desarrollaremos en próximos posts.
¿Cómo estás entrenando la fuerza?