Es sabido e incluso motivo de estrés pensar en nuestras vacaciones y sentir que nos veremos perjudicados en todo lo logrado en un proceso determinado.
En términos generales solemos relajarnos o tal vez el simple echo de no tener herramientas que nos permitan gestionarnos mejor, hace de que terminemos dañando nuestros procesos con excesos de alimentación chatarra y falta de movimiento.
En muchas ocaciones escucho que para estos momentos, a pesar de los desordenes nutricionales, se podría sostener los resultados simplemente con algunos kilómetros de caminata.
Hoy me gustaría transmitir a través de este post algunos puntos que te ayudarán a entender mejor cómo encarar estos momentos y que a través de herramientas concretas puedas mantenerte de la mejor forma.
Punto 1: claramente de vacaciones, fechas de fiestas o viajes laborales es probable que cueste mucho más llevar un plan estricto de alimentación, e incluso de entrenamiento. Esto se debe a varios factores externos que en muchas ocaciones son muy difíciles de anticipar, por lo tanto mi consejo es que entiendas que tal vez este no sea un buen momento para ser extremadamente estrictos y que la flexibilidad será crucial.
A pesar de esta flexibilidad que mencionamos anteriormente, hay algo que no es negociable; tenemos que hacer lo mínimo que nos permita mantenernos en forma, desde un abordaje nutricional y de ejercicio físico.
Punto 2: quince días o más de vacaciones sin entrenar la fuerza no está permitido. Incluso es el error más grande que solemos cometer.
El entrenamiento de la fuerza no es negociable y es lo primero que deberíamos anticipar para estas ocaciones.
Anticipar donde vamos a entrenar, si hay gimnasios cerca, si podemos presupuestar un gimnasio, que elementos llevar si vamos a entrenar en el hotel o al aire libre; son algunas de las cosas que deberíamos pensar antes de viajar.
Si, es verdad que muchas veces atribuíamos al viaje la imposibilidad de entrenar, pero hoy en día hay un montón de alternativas, y si decidimos no entrenar es una decisión personal y no de imposibilidad.
Punto 3: Durante el año manéjanos entrenamientos con frecuencia de cuatro o más días semanales, pero tal vez en un viaje queremos darle más tiempo al ocio e incluso a conocer y disfrutar otros momentos.
Por eso mi recomendación es que manejes una frecuencia de tres veces semanales tocando todos los músculos en cada sesión. De esta forma te garantizarás mantener tu estructura muscular.
Si sos manija y disfrutas de entrenar, pues sos de mi equipo y podrás entrenar más días 😂
Punto 4: si es verdad que la alimentación se dificulta estando de viaje, por lo tanto requiere de mucha organización poder sobrellevarlo y gestionarlo de la forma adecuada.
Obviamente, sin sos atleta y tenés alguna presentación cercana, no hay espacio a la flexibilidad. Pero que pasa con aquellos que buscamos llevar una vida equilibrada en lo físico y lo social, tratando de mantener una condición física óptima y saludable.
En estos casos te recomiendo que trates lo siguiente:
- Se moderado en tus salidas de la dieta.
- Tratá de comer al mínimo 4 comidas al día tratando de cumplir con tu aporte de proteínas.
- Evitá la ingesta excesiva de alcohol, o mejor evítala totalmente.
- Disfrutá el entorno social y que no sea un estrés.
- Tratá de mantenerte cumpliendo el 80% del plan de alimentación cotidiano.
Punto 5: Camina, conocé, recorré y tratá de mantener al menos unos 15000 pasos diarios.
Contar los pasos con algún dispositivo es una buena estrategia para mantener un gasto calórico elevado a través del movimiento. Si te gusta correr, podrás hacerlo siempre y cuando sea necesario. No te olvides que deberías tener un coach que te asesore para poder llevar un proceso adecuado y en dirección correcta.
Espero que te haya gustado y en próximos post te ayudaré a elegir que elementos no te deberían faltar si quieres entrenar en casa o en vacaciones.
Prof. Denis Pellizzari